RETES Guevara, José Ignacio
México, D. F., 1918
Foto de Omar Meneses
La Jornada. 8 de marzo 2000. P. 33
ctor, director, dramaturgo, escritor, guionista y argumentista cinematográfico. Nació en la Ciudad de México el 13 de noviembre de 1918. Ingresó a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para estudiar Letras españolas en 1938.

Fue actor y fundador del Teatro Universitario de San Luis Potosí en 1937. En 1940, al lado del Grupo Repertorio dirigido por Rodolfo Usigli, Retes continuó su trabajo como actor. Posteriormente trabajó como actor y asistente de dirección, también con Usigli, quien crea de manera independiente, el grupo Teatro de Medianoche, "llamado así porque era la única hora en que el Cine Rex podía utilizarse como teatro". (Ignacio Retes. 40 años en escena. (1ª parte) Por Josefina Brun. Escénica, publicación bimestral, Difusión Cultural UNAM, abril de 1984. P. 21).

Ese mismo año llegó a la Ciudad de México el director teatral Seki Sano, e Ignacio Retes ingresó al Teatro de las Artes, sin abandonar el grupo de Usigli. Al lado de Seki Sano trabajó como asistente de dirección para posteriormente fundar su propio grupo teatral: La linterna mágica, (1946-1949) en el Sindicato Mexicano de Electricistas. Ya para esta época había dejado sus estudios en la Facultad.

Actuó en las obras: La sirena varada (1937), Don Domingo de don Blas o No hay mal que por bien no venga (1939), La rebelión de los colgados (1940), Tres joyas (1953), Los hijos de Sánchez (1972), ¡Silencio pollos pelones, ya les van a echar su maíz! (1973) y El gran elector (1993), entre otras.

Foto de Omar Meneses. La Jornada, 8 de marzo de 2000. P. 33

Escribió su primera obra en 1944, El día de mañana, misma que fue publicada al año siguiente en la revista Letras de México. De su autoría también son: El aria de la locura (estrenada en 1953); Una ciudad para vivir (estrenada en 1954); Juan Pérez Jolote, versión escénica del texto homónimo de Ricardo Pozas (estrenada en 1964); Los hombres del cielo (estrenada en 1965) y Viento sur (estranada en 1970).

Su debut profesional como director teatral fue en 1950 con la puesta en escena de El cuadrante de la soledad, obra escrita por José Revueltas y escenografía de Diego Rivera. A dicha obra le siguieron: Terminal (estrenada en 1954); La feria distante (estrenada en 1957); Otelo (estrenada en 1960); Beckett o el honor de Dios (estrenada en 1961); Cyrano de Bergerac (estrenada en 1962); Historias para ser contadas (estrenada en 1967); Los albañiles (estrenada en 1969); Los hijos de Sánchez (estrenada en 1972); El estupendo cornudo (estrenada en 1982); Tina Modotti (estrenada en 1983); La chunga (estrenada en 1993); entre muchas más.

En 1954 era actor y director del Teatro Arena dirigido por Julián Soler. Entre 1954 y 1959 inició su trabajo en la televisión como director, guionista y actor. Profesor y director de la Compañía Teatral del Sindicato del Instituto Mexicano del Seguro Social. Traductor, codirector y actor en la compañía de teatro de Enrique Rambal (1957). (Ignacio Retes. 40 años en escena. Ob. Cit. P. 31)

"De 1959 a 1965 inició con Julio Prieto la organización de los teatros del IMSS [Instituto Mexicano del Seguro Social] del que fue nombrado director titular. Fue maestro de actuación del ICT [Instituto Cinematográfico de México] de la ANDA [Asociación Nacional de Actores]. Asimismo director interino en 1973 de la EAT del INBA [Instituto Nacional de Bellas Artes]". (CEBALLOS, Edgar. Diccionario enciclopédico básico de teatro mexicano. Siglo XX. México, CONACULTA, Col. Escenología, 1996. P. 389).

Ignacio Retes fue "considerado como el teatrista de México por el CNCA [Centro Nacional para la Cultura y las Artes] y el INBA" en 1995 (Ibid. P. 390).

Como escritor colaboró en algunas publicaciones, primero como crítico de teatro en la revista México al día, 1944 y posteriormente realizó periodismo político en Revista de Revistas (1974). Fue autor de las novelas Nostalgia de la tribu (Editorial Planeta, 1995) y Por supuesto (Océano, 2000).

Dentro de la industria fílmica participó en la creación del guión cinematográfico Albur de amor (Dir. Alfonso Patiño Gómez, 1947) en 1946. Fue guionista, argumentista y actor, e incluso director de cine. "En 1948 filma una película no profesional titulada Noches de angustia, y en 1950 debutó como guionista y director cinematográfico profesional con un filme documental sobre la expropiación petrolera: El fuego cautivo (...) En ese mismo año filma otro documental, en 35 mm, para la recién creada Secretaría de Recursos Hidráulicos: La profecía". (Ignacio Retes. 40 años en escena. Ob. Cit. P. 13).

Participó en el concurso de Guionismo que convocó la SOGEM (Sociedad General de Escritores de México) con el guión: Unos cuantos días, obteniendo el 1er lugar (1977). Escribió los guiones de las películas: Flores de papel (Dir. Gabriel Retes, 1977); Bandera rota / Historia de un crimen (Dir. Gabriel Retes, 1978); Viaje al paraíso (Dir. Ignacio Retes, 1985) y La ciudad al desnudo (Dir. Gabriel Retes, 1987).

Ha actuado en cintas como: Doña perfecta (Dir. Alejandro Galindo, 1950); Xoxontla, tierra que arde (Dir. Alberto Mariscal, 1976); Los náufragos de Liguria (Dir. Gabriel Retes, 1983); Bienvenido-Welcome (Dir. Gabriel Retes, 1993); Por si no te vuelvo a ver (Dir. Juan Pablo Villaseñor, 1996); De noche vienes, Esmeralda (Dir. Jaime Humberto Hermosillo, 1997) y Un dulce olor a muerte (Dir. Gabriel Retes, 1998); entre otras.

Gabriel e Ignacio Retes durante la filmación de Un dulce olor a muerte (Dir. Gabriel Retes, 1998)
La Jornada. 20 de abril de 1998. Foto de Omar Meneses

De su incursión dentro de la industria cinematográfica, Ignacio Retes comentó: "Todo mundo cree que primero estuve en el teatro y después en el séptimo arte, pero el cine fue primero siempre. Yo quería ser cineasta; había extraído del teatro el aprendizaje del actor; sin embargo el cine me gustaba mucho e hice un documental experimental [...] También fui actor con Gómez Muriel y mis amigos de entonces. A Julio Bracho lo quise mucho y él a mí, pero en ese entonces entrar al cine era muy difícil, el núcleo estaba cerrado. Además mi propósito no era actuar; si así hubiera sido seguramente ahí continuaría; me fui retirando del cine porque no tenía nada que hacer. Años más tarde mi hijo Gabriel, quien ya estaba en el cine profesional, me llamó para volver a actuar. A partir de entonces compañeros suyos como Felipe Cazals, Jorge Fons, o [José] Estrada, se interesaron por mí. Nunca he dejado de querer al cine, aunque no trabajé como cineasta". (Homenaje a Ignacio Retes en la UNAM y en el INBA. Por Carmen García Bermejo. El Financiero, sección cultural, 31 de mayo de 1995. P. 55).