PARDO Neria,
Ángel Gerardo

México, D. F., 1955
 
Foto de Duzko Velázquez de la Rosa

irector, productor, editor, compositor musical y guionista de cine y televisión. Gerardo Pardo, como es conocido en el ambiente cinematográfico, nació el 1º de octubre de 1955 en la Ciudad de México. Estudió en el Conservatorio Nacional de Música (1974), Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM (1976) y Dirección Cinematográfica en el Centro de Capacitación Cinematográfica.

Su Ópera Prima Max Domino (1979-1980) obtuvo el Ariel a la Mejor Dirección y participó en el IX Festival Internacional de Cine de Lille, Francia. Gerardo Pardo dirigió, produjo, escribió, editó y realizó la composición musical de esta película. Tres años más tarde conjugó nuevamente estas actividades en el filme Deveras me atrapaste (1983) que participó en el Festival Internacional de Cartagena, Colombia en 1984 y estuvo nominada al Ariel por Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Música Original.

En 1990, Gerardo Pardo fue el director, coguionista y editor de diez capítulos para la serie televisiva Hora marcada. Asimismo, fue el director, coproductor, coguionista y coeditor de Millonario a la fuga (1991) y director y coeditor de Doble venganza (1991), ambas películas realizadas especialmente para televisión en 35 milímetros. En 1997 fue el director, coguionista y editor de Table dance y director de Calavera de azúcar, ambos cortometrajes en 16 milímetros para la serie Cuentos para solitarios producida por MVS Televisión

Gerardo Pardo ha dirigido dos telenovelas para Televisión Azteca tituladas Señora (1998) y Marea brava (1999).

También ha trabajado en la dirección y producción de promocionales, comerciales, documentales, video clips y programas especiales para la iniciativa privada y el sector público.

Desde 1998 y hasta septiembre de 2002 se ha dedicado a la producción y dirección de cine y televisión en su empresa “Producciones El Ángel Azul”.

En cuanto a su actividad como guionista, nos comentó: “La experiencia para mí, de escribir para el cine vino como una necesidad de dirección. Sobretodo empieza cuando tú tienes que producir tu misma película y no tienes la posibilidad de tener un banco de guiones o de que alguien te mande sus guiones; porque los guionistas se los mandan a los directores con mayor actividad o éxito del momento” (Entrevista para Escritores del Cine Mexicano Sonoro. Septiembre 2002).

“El escribir para el cine no es como escribir una novela. No es literatura en sí; no estás haciendo una novela, no estás haciendo cuento, estás escribiendo en un lenguaje que no considero literario. Son pocos guiones los que se publican. Entonces, tú escribes fundamentalmente lo que quieres ver en una película. Es muy especial el trabajo del guión, porque tienes que pensar cinematográficamente y tienes una estructura dramática especial para hacer el cine... El guión es muy técnico, se escribe por secuencias y no tienes la posibilidad de describir entornos como en una novela o un cuento” (Ibid).