eriodista, escritor, traductor, actor, director y guionista cinematográfico. José López Rubio nació en Motril, Granada el 13 de diciembre de 1903 y falleció en Aranjuez, Madrid, el 2 de marzo de 1996.

Desde temprana edad se trasladó a la ciudad de Madrid y después viajó a Cuenca, donde su padre obtuvo el cargo de gobernador. En 1919 inició sus estudios en Derecho y al año siguiente trabajó como periodista en las revistas Buen Humor, La Esfera, Blanco y Negro y Gutiérrez. De manera alterna publicó su libro Cuentos inverosímiles en 1924 y su novela Roque Six, que se publicó en 1928.

En 1929 incursionó por primera vez como dramaturgo con la obra De la noche a la mañana, que fue traducida al inglés, portugués e italiano; además de que fue premiada en el Concurso Teatral A.B.C, de Madrid. Sus siguientes obras fueron Casa de naipes, puesta en escena en 1930, y las comedias Un hombre de bien y El año 2500, escritas junto con Enrique Jardiel Poncela.

Durante la década de los treinta, José López Rubio viajó a Hollywood, donde fue contratado para escribir los diálogos de las películas habladas en español, producidas por la Metro Goldwyn Meyer entre las que se encuentran La mujer X, que interpretó José Crespo, y Fruta amarga que protagonizó Virginia Fábregas. Más adelante comenzó su labor como adaptador en la casa productora Fox, donde participó en cerca de 35 películas, algunas de las cuales interpretó el tenor José Mojica. (Habla José López Rubio. Por Catalina D’Erzell. Revista de Revistas, No. 1476, 4 de septiembre de 1938. P. 23)

Entre los años 1932 y 1935, incursionó en diversos filmes estadounidenses como actor, entre ellos: Marido y mujer (1932), No dejes la puerta abierta (1933), Primavera en otoño (1933), Una viuda romántica (1933), Señora casada necesita marido (1935) y Te quiero con locura (1935).

En 1937 regresó a España con el propósito de filmar la cinta La malquerida, pero no pudo concluirla debido a la Guerra Civil, por lo que regresó a trabajar a Hollywood. Al poco tiempo viajó a Cuba y después a México, donde fue contratado por el industrial chihuahuense y presidente de Producciones Internacionales S. A., Miguel de León, como productor asociado y supervisor.

Durante su estancia en México escribió el guión de la cinta María que realizó el director Chano Urueta en 1938. Además continuó su trabajo al frente del Departamento de Selección de Argumentos y Actores, lo cual provocó severas críticas dentro del medio cinematográfico mexicano, por lo que al ser entrevistado por Catalina D’Erzell, López Rubio refirió lo siguiente:

“No he venido a México como hambriento –tengo en Hollywood tres contratos pendientes– ni en busca de fortuna, ni a quitar el pan a nadie, sino especialmente contratado por una nueva compañía productora que ha juzgado útiles mis servicios y aprovechable mi experiencia cinemática. En el puesto que ocupo no voy a hacer sombra a nadie, puesto que ni siquiera mi contrato es de escritor y en él he especificado que colaboraré con los escritores mexicanos que hayan de hacer nuestros ‘scripts’. He venido de buena fe, de frente y a cuerpo limpio, para colaborar lealmente con elementos mexicanos. Y a eso voy lleno de entusiasmo profesional. Mi labor será la mejor prueba de afecto por México y a ella quiero que se atengan, con un poco de paciencia, los que me atacan en la sombra(...). El amor a un país no se siente con sólo pasar la frontera, sino cuando se aprende a descubrir el recatado fondo de su alma. Hasta la fecha mi estancia es tan corta que sólo adoro de México cuatro cosas que han llamado más pronta y fuertemente mis sentidos: el cielo, la fruta, la mujer y la música.” (Habla José López Rubio. Ob. Cit.)

En 1940, regresó nuevamente a España y concluyó La malquerida. Ocho años más tarde publicó su libro sobre cine Panorama del cine español. En su país natal continuó escribiendo obras de teatro que en su mayoría se adaptaron a la televisión, entre ellas: Alberto (1949), Celos del aire (1950), Veinte y cuarenta (1951), Cena de navidad (1951) y La venda en los ojos (1954).

Además, como guionista José López Rubio escribió en su país natal cerca de treinta películas como: Pepe Conde (1941), La luna vale un millón (1945), Alhucemas (1947), Crimen en el entreacto (1950), Aeropuerto (1953), Chantaje a un torero (1963), Currito de la Cruz (1965), La mujer de otro (1967), Dos hombres y en medio dos mujeres (1976) y Préstamela esta noche (1977).

También fue miembro de la Real Academia de la Lengua Española, desde 1982 hasta su muerte.