GARCIADIEGO Ojeda, Paz Alicia
México, D. F., 1949

Foto proporcionada por la autora

 
rofesora y guionista. Nació el 4 de septiembre de 1949 en la Ciudad de México. Estudió Letras Españolas y Estudios Latinoamericanos en la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México), posteriormente realizó otros estudios en Estados Unidos.

En 1981, obtuvo el segundo lugar en el Primer Concurso Nacional de Historieta de la Secretaría de Educación Pública (SEP), por el guión Tiempo de adioses.

Ha sido profesora de Historia de América Latina en distintas universidades, así como de diversos cursos y talleres de guión cinematográfico. Fue asesora del taller por el Sudance Institute (Advisor in the Screenwriters workshop) en Guadalajara en 1993 y 1994. Ha escrito también una gran cantidad de guiones para televisión y documentales.

“Estudié Letras en la Facultad de Filosofía de la UNAM, después realicé estudios latinoamericanos mexicanos, incluso trabajé en un centro de investigaciones para América Latina y el Caribe. Luego comencé a escribir historietas sobre el pasado de México. El destino me llevó a la radio, el paraíso para todos los guionistas, porque no hay problemas de producción. Durante un buen tiempo estuve en el IMER [Instituto Mexicano de la Radio], Radio Educación, Radio UNAM. Hice el recorrido de todos los guionistas nacionales. También trabajé en la Unidad de Televisión Educativa y Cultural (UTEC) y de ahí salté a El imperio de la fortuna. Tuve mucha suerte, ya que podría haberme quedado en ese nivel, por eso valoro la radio, porque me sirvió mucho para ganar oficio, tener disciplina y trabajar bajo presión”. (Quiero contar historias donde haya paradojas y el destino sea inexorable: Paz Alicia Garciadiego. Por Emilio Marés. La Crónica de hoy. Sección espectáculos, 11 de noviembre de 1996. P. 18B)

Garciadiego tuvo su primera incursión en el cine con la película El imperio de la fortuna (Dir. Arturo Ripstein, 1985). De esta experiencia comenta: “Conocí a Arturo en UTEC porque a él le ofrecieron hacer unos programas de televisión y pidió que yo fuera la guionista. Los hice y le gustaron, pero jamás se realizaron. Seis meses después, Ripstein me llamó para hacer el guión de El imperio de la fortuna.” (Idem). Garciadiego además compuso la letra de la canción Las rosas de mi rosal, tema de la película.

“Basada en un estupendo guión de Paz Alicia Garciadiego, Ripstein realiza una versión completamente diferente de El gallo de oro, de Juan Rulfo (argumento llevado a la pantalla por Roberto Gavaldón en 1964). (...) En la que es su mejor película en los últimos años, Ripstein, dejando de lado los tradicionales toques folcloristas, nos enfrenta a una realidad mexicana y actual: el campo urbanizado, [definida por la misma Garciadiego como] (...) una pobreza de poliéster en la que las camisetas con aplicaciones de plástico, los lentes negros y las chamarras decoradas con estoperoles, señalan el irremisible fin del rancho como lugar incontaminado y receptáculo ideal de los valores nacionales”. (Los signos de la depresión. Por Susana López Aranda. Revista Universidad de México. Diciembre de 1986, No. 431. P. 47)

Hasta el momento (septiembre, 2001) Paz Alicia ha escrito 13 guiones. Por otro lado, al referirse a su trabajo como guionista, en entrevista para Escritores... Garciadiego Ojeda señaló que: “No sé si sea diferente escribir para el cine que escribir-escribir. A mí me gusta escribir para el cine: necesariamente tienes que cerrarla en un lapso de tiempo, te obliga a tener una estructura más concisa que la novela, a mí me gusta eso. El cine es gregario, el cine es una experiencia compartida con todos los que trabajan conmigo”. (Entrevista para Escritores del cine mexicano sonoro, julio de 2001)

En 1988, Garciadiego escribió el guión de Mentiras piadosas (Dir. Arturo Ripstein), donde “(...) el universo y los personajes son a la vez reconocibles y estilizados, en muchos momentos trágicos, y aparecen los grandes temas (la existencia, el amor) que hacen que el filme transcienda los límites de una clase social determinada para hablarle al Hombre, (...)”. (El universo ripsteiniano, sin salida. Mentiras piadosas. Por Nelson Carro. Tiempo Libre. Publicación semanal, 28 de noviembre de 1989. P. 11)

Vendría Ciudad de ciegos (Dir. Alberto Cortés, 1990), para la cual escribió el monólogo de la suicida La resaca. Este filme se exhibió en los festivales de Cine Mexicano en Guadalajara; Cine Latino en Nueva York; La Habana; New Director y New Films.

En 1991, construyó el guión de una nueva versión de La mujer del puerto (Dir. Arturo Ripstein, 1991). “La idea de adaptar La mujer del puerto surgió porque una vez platicando [con Emilio García Riera] sobre el cine mexicano y de su incapacidad para contar historias de la gente ‘de a de veras’. De repente digo: te imaginas una película con Andrea Palma pero con una puta que tenga cara de puta y a partir de ahí surgió la idea y luego por supuesto me alejé muchísimo de la película de Andrea Palma [Dir. Arcady Boytler, 1933], más bien me quería basar en el cuento de Maupassant pero el cuento de Maupassant es una secuencia, son sólo dos páginas. (...) A final de cuentas [la versión adaptada por ella] es una película que me gusta enloquecidamente (...)”. (Entrevista para Escritores ... julio de 2001)

A la escritora Paz Alicia, le gusta contar historias a propósito de la miseria humana, “(...) del momento trágico de la vida de la gente”. Ya que cree que la humanidad no se encuentra dentro de la felicidad. “La humanidad la encuentro donde hay ruptura del orden, del orden social tradicional. En esos momentos donde (...) el personaje tiende a desnudarse y se quita las ataduras (...) de la cotidianidad y del colchón de la tranquilidad que te da una rutina en donde sabes qué lugar ocupas en el espacio, quién eres y hacia dónde vas. Cuando esa cotidianidad, esa tranquilidad se rompe, se destroza, tiene que salir, tiene que emerger la humanidad en carne viva.” (Idem)

Un claro ejemplo de esta concepción es Principio y fin (Dir. Arturo Ripstein, 1993), adaptación que Garciadiego hizo de la novela homónima del Premio Nobel egipcio Naguib Mahfouz. Filme desgarrador que narra la historia del derrumbe simbólico y físico de una familia. Acerca de esta historia Vicente Leñero, con motivo de la entrega de la Concha de Oro a Arturo Ripstein por esta cinta, declaró: “Me encantó la película y pienso que es la mejor que ha hecho Ripstein, (...) La cinta tiene un nivel y una calidad poco comunes en el cine mexicano. No conozco la novela de Mahfouz, pero me parece que la adaptación de Paz Alicia al medio mexicano es excelente. Yo creo que Ripstein encontró en ella su guionista para siempre. Paralelamente, lo siento, ya que los escritores que trabajábamos con él quedamos desplazados, pero bien desplazados por una guionista de altísima calidad”. (Beneplácito de cineastas por el premio a Principio y fin. Por Xavier Robles. La Jornada. Sección cultura, 5 de octubre de 1993. P. 30)

De su relación creativa, la esposa y guionista de Arturo Ripstein comenta: “Tenemos una visión del mundo muy similar. No es la suma de dos visiones, hay una parte que es de él y otra que es mía y se combinan. A los dos nos interesan las mismas historias y tenemos el mismo tono para contarlas”. (Ripstein busca a un responsable del filme sobre Soriano. Por Columba Vértiz. Proceso. Publicación semanal, No. 1300, 30 de septiembre 2001. P. 71)

Archivo Proceso
Proceso. No. 1140, 6 de septiembre de 1998. P. 68

Otra película escrita por Garciadiego fue La reina de la noche (Dir. Arturo Ripstein, 1994), basada en la vida de Lucha Reyes, donde conjugó la ficción con datos biográficos de la cantante, de la cual Nelson Carro comentó: “(...) no se trata de una biografía festiva, de glorificar a la cantante o al mito, sino al revés, de utilizarlo para retratar la desintegración y la decadencia total”. (La reina de la noche. Por Nelson Carro. Tiempo Libre. Publicación semanal, del 20 al 26 de julio de 1995. P. 4). Cabe destacar que Paz Alicia compuso también, las letras de las canciones de esta realización y obtuvo, junto con Lucía Álvarez el Ariel por Mejor Música de Fondo en 1996.

En 1996, escribió Profundo Carmesí (Dir. Arturo Ripstein, 1996), basada en un melodrama donde la protagonista abandona a sus hijos para seguir a un hombre. Garciadiego, explicó: “El melodrama no es la telenovela, ni la historia de llanto, mujeres sufrientes ni amor rosa, es un género del siglo XIX, fundamentado en la literatura, que se refiere a historias que no llegan a ser tragedias”. (Defiende Garciadiego el melodrama. Reforma. Sección Gente, 8 de agosto de 1997. P. 11E)

“(...) Es una historia de amor loco, entre una pareja de solitarios y marginados sociales que se conocen a través del correo sentimental; es un amor llevado a sus últimas consecuencias, en donde se describe todo su camino destructivo”. (Interés por los seres humillados y ofendidos. Por Alejandro Cárdenas Ochoa. El Nacional. Sección espectáculos, 7 de marzo de 1996. P. 37)

Posteriormente, escribió el guión de El evangelio de las maravillas (Dir. Arturo Ripstein, 1998) basado en un caso real de los años setenta, referida a una secta religiosa llamada La Nueva Jerusalem.

Escena de la filmación de El evangelio de las maravillas
Cinemanía. Año 2, No. 17, febrero de 1998. P. 10

“(...) Es como un fresco, porque tres horas no alcanzan para contar una historia de todo un pueblo, ni dos horas tampoco. Entonces opté por un dibujo horizontal, donde no hay una narración cronológica, sino espatulazos, donde cada personaje cuenta un pedacito hasta llegar al final, que es el final del mundo. Es una historia muy compleja, no fue fácil escribirla”. (Paz Alicia Garciadiego relató como su marido Arturo Ripstein filmará, por fin su guión sobre “La nueva Jerusalem”. Entrevista de Héctor Rivera. Proceso. Publicación semanal, sección cultura, 26 de octubre de 1997. PP. 63-64)

Al poco tiempo Paz Alicia inició en marzo de 1997 la adaptación del texto de Gabriel García Márquez: El coronel no tiene quien le escriba, de la cual ha dicho: “(...) fue como hacer un ejercicio de matemáticas, como un buen dulce, como una guayaba en almíbar que no necesita ni azúcar ni nada, que la pones en agua y queda deliciosa (....)”. (El guión que hizo llorar a Ripstein: “El coronel soy yo”. Por Héctor Rivera J. Proceso. Publicación semanal, 6 de septiembre de 1998. P. 68)

El coronel no tiene quien le escriba (Dir. Arturo Ripstein, 1999) es una película conmovedora y autobiográfica, donde según Paz Alicia, Arturo Ripstein se sintió plenamente identificado con el coronel y de la cual recuerda: “Me acosté a las nueve a dormir y lo dejé leyendo [a Arturo Ripstein]; al día siguiente me levanté, como a las siete y media de la mañana, él estaba despierto, estaba terminando de leer el guión y estaba llorando. La primera cosa que me dijo fue: yo no sabía que me querías tanto”. (Idem)

Garciadiego realizó varios cambios al texto original para poderlo adaptar al cine y hacerlo suyo. “La única forma que encontré para acercarme fílmicamente a la historia fue, paradójicamente, alejándome lo más posible de los entornos y los tiempos de García Márquez, así que dije adiós a Macondo, y la cultura que conozco es la que me transmitió mi abuela aquí en Veracruz, así que, para decirlo de algún modo, me vine para acá”. (El coronel sí tiene quien lo filme II. Por Javier González Rubio. La Jornada. Sección cultura, 13 de septiembre de 1998. P. 21)

Siguió Así es la vida (Dir. Arturo Ripstein, 2000), filme que narra el amargo aroma de las pasiones. En él se exhibe el gusto de Paz Alicia por narrar la parte áspera y dura de la existencia humana; y después La perdición de los hombres (Dir. Arturo Ripstein, 2000), que es el último guión de Paz Alicia Garciadiego llevado a la pantalla hasta hoy [septiembre, 2001]. “Esta película es muy mexicana, por el ambiente y por el concepto, (...) Muy mexicana en concepto porque la relación con el absurdo es el leit motiv de la película y por la disociación que existe en la película entre los actos y sus consecuencias. Es fácil encontrar la idea de lo absurdo en lo mexicano, tenemos una relación esquizofrénica con la realidad, aprehendemos al mundo antes de conocerlo". (Ripstein regresa al "México profundo" con la película 'La perdición de los hombres'. Por Elsa F. Santos. El País. Sección espectáculos, Madrid, España, 8 de noviembre de 2000. P. 34)


Esta última cinta gustó mucho en San Sebastián por “su humor fresco y novedoso”, Paz Alicia comenta: “Los europeos estaban impresionados. El humor negro en relación con la muerte les fascinó. En España les llamó la atención los diálogos, la recuperación del español mexicano. En España se subtituló en español, para ellos era ininteligible, no saben qué es carretilla, reata, nopal, escuincle, móndrigo —que se dejó de usar en España en el siglo XII—”. (Ripstein busca a un responsable del filme sobre Soriano. Por Columba Vértiz. Proceso. Publicación semanal, No. 1300, 30 de septiembre de 2001. P. 71)

Actualmente, la pareja Garciadiego - Ripstein trabaja en un nuevo proyecto, que se empezará a filmar en octubre de este año (2001). Debido a ciertos problemas de registro autoral no se define todavía el nombre de su próximo largometraje. Ya que el nombre que habían elegido, Señora tentación, ya está registrado con una telenovela.

Durante su carrera como escritora de historias cinematográficas Paz Alicia ha recibido los siguientes reconocimientos: primer lugar al Argumento y Guión Cinematográfico por Mentiras piadosas, en el Festival de Bogotá (1989); primer premio del Concurso Latinoamericano de Nuevo Cine, premio con apoyo financiero al entonces proyecto de La reina de la noche; premio al Argumento y Adaptación por el guión de Principio y fin, en el Festival Internacional de Cine de Estambul (1994); primer premio por el guión Profundo carmesí, en el Concurso Iberoamericano de Guión del Festival Internacional de La Habana (1995); Ocella de Oro al Mejor Guión por Profundo carmesí, en la Mostra Internacionale de Cinema de Venecia (1996); y Concha de Oro al Mejor Guión por La perdición de los hombres, en el Festival de San Sebastián (2000). Además, en 1999, fue becaria Guggenheim y desde 1995, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA).

Para Paz Alicia el guión cinematográfico sí es una forma de literatura, "(...) en tanto que es un relato con un principio, un desarrollo y un fin, con una dramática, una retórica muy precisa y muy propia basado en imágenes. La literatura también esta basada en imágenes. (...) Mis guiones parecen novelas, son muy detallados, muy descriptivos. Tienen descripción incluso de pensamientos, de cosas que jamás se van a ver en la pantalla. Para que el personaje vaya tomando autonomía y vaya adquiriendo voz propia (...)". (Entrevista para Escritores... julio de 2001)

Sobre su primer guión cinematográfico recuerda: "(...) me dijo [Arturo Ripstein]: tú eres muy minuciosa, utiliza tu minuciosidad para los guiones, pon todo lo que se te ocurra. Le tomé la palabra y en El Imperio de la fortuna, un guión de 350 páginas, estaba descrita la salsa Búfalo picante y cómo estaba la etiqueta de la botella ligeramente manchada y levantada de una orilla". (Paz Alicia Garciadiego relata cómo su marido Arturo Ripstein filmará por fin su nuevo guión sobre la Nueva Jerusalem. Por Héctor Rivera J. Proceso. Publicación semanal, 26 de octubre de 1997. P. 64)

La escritora de Mentiras piadosas considera que la situación actual del guionismo, en el mundo entero, se encuentra mal debido a un afán por construir historias similares al cine norteamericano de Hollywood. "El resultado es que cada vez hay más películas muertas, guiones más muertos en todas partes del mundo. Guiones que imitan, que son copia fiel, calca fiel de Hollywood. (...) y que hacen un esfuerzo inaudito en todas las latitudes para que lo que cuenten parezca que sucede en Manhattan y lo único que resultan son guiones muy provincianos".

A Paz Alicia no le gusta hablar del cine mexicano porque le parece “(...) muy torpe la gente que hace declaraciones de sus colegas. Son mis colegas y afortunadamente no soy crítico de cine. Sin embargo considera que no hay nuevo cine mexicano sino “autores, autores individuales, y los autores individuales sólo se pueden juzgar, valorar cuando el tiempo permite sujetar la balanza. Sólo el tiempo permite evaluar (...)"

Paz Alicia cree que la cinematografía nacional "(...) tiene un problema de identidad muy grande, por supuesto, no es que nos falten historias, lo que nos falta es cara. Lo que nos imposibilita contar nuestras historias es que queremos que nuestras historias tengan otra cara".

Alicia Garciadiego no tiene pensado dirigir y concluye: "Me inclino más por escribir novela que por la dirección. Lo mío son las letras, lo mío son las palabras y me he mantenido a Dios gracias virgen de cualquier técnica cinematográfica, si algún día hago algo que no sea cine será novela". (Entrevista para Escritores...)

Garciadiego ha publicado los siguientes textos: Por qué escribo melodrama, Le cinemá latinoamericain, Toullose (1995); Noche de filmación, Revista Nosferatu, (octubre, 1996); Profundo carmesí, ed. El Milagro, México (1996); La mujer del puerto, ed. Viridiana, Madrid (1997); Mexican melodrama: in the search of a national identity, Santa Cruz University Press, California (1995); Il melodrama: il su tree raggione. La eta d'oro nel cinema mexicano, Torino, Festival del cinemá Giovanni (noviembre, 1997); El evangelio de las maravillas (1998) y El coronel no tiene quien le escriba (1999), Universidad Veracruzana; El cine actual y el cine de oro, ponencia publicada en las memorias del ciclo sobre derechos de autor organizados por SGAE, Madrid (1999); Así es la vida, ed. Ocho y medio (en prensa), Madrid (2000); así como, La perdición de los hombres, ed. Ocho y medio; Madrid (2000) en coedición con el instituto Mexicano de la Cinematografía (IMCINE) y la Cineteca Nacional (en preparación, octubre 2001).