GÁMEZ
Contreras, Rubén Cananea, Sonora,
1928 Ozumba, Estado de México, 2002 |
|
| Dicine,
No. 48, noviembre de 1992, P. 25 |
irector,
guionista y camarógrafo. Nació en Cananea, Sonora,
el 8 de diciembre de 1928 y murió el 3 de octubre de
2002 en Ozumba, Estado de México.
Estudió
fotografía comercial y sensitometría
en el Frank Wiggins Trade Technical Junior College y en la Universidad del Sur
de California en Los Ángeles, California. Fue camarógrafo desde
1957 de noticieros de cine publicitario para Barbachano Ponce y Productores Unidos.
En
1957 visitó la República Popular China y filmó un documental
sobre ese país. En 1963 realizó el cortometraje Magueyes
con la ayuda en la producción de Gustavo Alatriste. En 1965 ganó
el primer lugar del concurso de cine experimental, además de los premios
a la mejor dirección y a la mejor edición, por la película
La fórmula secreta (1964). Sobre esta
película la crítica expresó: “La
fórmula secreta, de Rubén Gámez, fue el primer escándalo
del festival. Una parte de la crítica, y sobre todo el público,
la recibió bien, y al final la aplaudió frenéticamente [...]
Las reacciones muestran que una de las cualidades de la película es la
de sacudir. [...] Ciertamente La fórmula secreta
recuerda por momentos en su forma al cine de vanguardia de 1930. Pero eso se olvida,
es secundario: lo que cuenta es que grosera, demagógica y todo lo que se
quiera, la película de Gámez es un grito, un puñetazo, un
despertar. Es una película hecha con rabia, con los intestinos; hecha por
alguien con un deseo imperioso de decir algo que tiene dentro y decirles no a
los estetas de capilla”. (El nuevo cine mexicano
en el festival de Pesaro. Por Rubén Gámez. La
Cultura en México, No. 235, suplemento de la
revista Siempre!, No. 686, 17 de agosto
de 1966. P. XIX)
Sobre esta película, el propio Gámez
expresó también que: “Desde que hice el script
de mi película pensé en llevarme el premio. [...] es una oportunidad
para que yo siga haciendo mi cine, cine de vanguardia: me refiero al cine experimental
entendido el término en el exacto sentido de la palabra. [...] Mi pretensión
es crear realmente un cine mexicano, el mexicano de Rulfo. Yo creo que el cine
mexicano debe tener una expresión propia como la tiene su pintura.”
(Con sus jóvenes, el cine mexicano del futuro
es una realidad. La Cultura en México,
No. 181, suplemento de la revista Siempre!,
No. 632, 4 de agosto de 1965. P. V)
En 1965 Alejandro Galindo
le ofreció entrar al sindicato cinematográfico, pero Gámez
rechazó la oferta. En 1967 empezó a filmar Amor
en 90 minutos. Con
Tequila (1991) obtuvo el primer lugar en 1992 en la categoría de
Tema Libre en el IV Concurso de Cine organizado por el Fideicomiso de Estímulos
al Cine Mexicano (FECIMEX) en colaboración con el Sindicato de Trabajadores
de la Producción Cinematográfica (STPC) y el Instituto Mexicano
de Cinematografía (IMCINE). Ha realizado varios cortos documentales entre
los que se encuentran: Día de México
/ Fiesta mexicana en Washington (1974), Grijalva:
Río de oro (1974), Los murmullos
/ Hijos del maíz (1974), Valle
de México (1976) y Hermitage en México
(1976).
Rúben Gámez recibió varios
reconocimientos, entre ellos: el Ariel (1975)
en la categoría Mejor Cortometraje de Ficción por Los
murmullos, la Medalla de la Filmoteca de la
UNAM (1998) por su destacada labor en el cine independiente y Ariel
de Oro (2001) en reconocimiento a su obra fílmica.
En una nota del periódico El
Universal titulada Gámez
responde a Macotela, el propio cineasta mencionó
tres guiones cinematográficos que fueron presentados
al IMCINE: El Mecate, Luvina
y Arri que están
registrados bajo su nombre, pero que no han tenido la oportunidad
de ser producidos. También expresó: ”A lo
largo de este escrito he mencionado algunos de mis guiones,
aunque tengo otros que por no tener relación he dejado
de mencionar. [...] quiero hacerle saber que el cine que creo
que soy capaz de hacer, tiene la cualidad [...] de no ser un
cine común y corriente. Ahora, si este cine como tantas
veces se ha dicho, no es comercial, esto me tiene absolutamente
sin cuidado aunque sea un alto riesgo para los productores del
cine como negocio. Por esto señor licenciado, no he ido
por ahí tocando puertas, y porque creo que únicamente
el Estado puede y debe patrocinar este tipo de cine”.
(Gámez responde a Macotela.
Por Rubén Gámez. El
Universal, 23 de noviembre de 1986).
GUIONES
INÉDITOS
El más
allá del amor
La perla en la boca
El mecate
Luvina
Arri