ARAU Incháustegui, Alfonso
México, D. F., 1932

 
Expediente Alfonso Arau. Acervo Cineteca Nacional

ailarín clásico y moderno, mimo, comediante, director y escritor de cine. Nació en la Ciudad de México el 11 de enero de 1932. Ingresó a la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México) para cursar la carrera de Medicina, misma que abandonó para estudiar Actuación con Seki Sano, Ballet clásico con Sergio Unjer por cuatro años y Danza moderna por tres años con Guillermo Arriaga.

En la década de los cincuenta se lanzó a la tarea de formar un dueto cómico musical con Sergio Corona que duró ocho años, el cual se llamaba Corona y Arau y era famosos por sus rutinas de tap. En 1952 debutaron en el cine con la película El casto Susano (Dir. Joaquín Pardavé). En 1955 obtuvieron su primer estelar en Caras nuevas (Dir. Mauricio de la Serna).

Alfonso Arau radicó un tiempo en Cuba (1959–1964), durante la época posrevolucionaria, donde fundó y dirigió el Teatro musical de La Habana. Tuvo su propio programa de variedades El show de Arau y filmó como complemento el corto Alfredo va a la playa. En 1964 regresó a México a continuar su carrera cinematográfica con En este pueblo no hay ladrones (Dir. Alberto Isaac) donde participó como actor.

Inició sus estudios de pantomima con Alejandro Jodorowsky y viajó a París para estudiar durante dos años con Dac Roux, maestro de Marcel Marceau y Lecog.

En 1966 debutó en México en el teatro con Paren al mundo, que quiero bajarme, escribió y actuó en un espectáculo de pantomima Locuras felices dirigido por Alejandro Jodorowsky, que fue presentado en París, Londres, Montreal (Expo-67) y por último en 1968 en la Feria Mundial de San Antonio, Texas. En 1968 se abrió el concurso experimental de cine y las puertas del sindicato de directores. Era un buen momento para regresar, primero a editar 12 números de la historieta El águila descalza, la misma que llevó al cine como actor, director y argumentista en 1969. Con esta película ganó cuatro Arieles, y tres Diosas de Plata.

En 1973 realizó la cinta Calzonzin Inspector (1973), basada en la historieta de los Supermachos de Rius [Eduardo del Río], y en El inspector de Gogol, con la cual ganó el Gran Premio del Festival de El Cairo, Egipto.

Cartel publicitario de Calzonzin inspector
Colección Gustavo García, en Nuevo Cine Mexicano. México, Clío, 1997. P. 34

Estudió en la escuela de cine de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) las especialidades de guionismo y producción independiente. En 1976 realizó en Cuba un documental por encargo del gobierno mexicano llamado Caribe, estrella y águila.

Con Mojado power (1980) obtuvo el Gran Premio de Biarritz, Francia, y Huelva, España; además participó para el Oscar como la mejor película extranjera en 1982. Sobre esta película Arau dijo: “No es cierto que haya habido alguna censura política o ideológica con Mojado power; lo que pasa es que sufrió los efectos del monopolio del cine nacional, tan apapachado por papá gobierno. Efectivamente, parece mentira que haya triunfado en el mundo entero mientras en nuestro país nunca se estrenó (en Francia la película formó parte del programa cultural de Mitterand y con un videocasete y tres libros muy bien planeados sirvió para enseñar el español en las secundarias y preparatorias). La tuve que distribuir en video antes de que se estrenara en los cines, porque no me quedó de otra”. (Como para volver a vivir. Por Ana Lilia Arias. La Jornada Semanal, 11 de marzo de 1990).

En 1985 realizó Chido Guan / Tacos de oro, “Una combinación de los melodramas de Ismael Rodríguez con el cine deportivo de Alejandro Galindo y con las películas de gángsters de Juan Orol” como él mismo la definiera. (Exhiben mutilado el último film de Arau. Por Patricia Vega. La Jornada, 14 de enero de 1987. P. 35)

Como actor participó en cintas como El topo (Dir. Alejandro Jodorowsky, 1971) y La pandilla Salvaje (1969), de Sam Peckinpah, director que lo dejó marcado e influyó en su visión como director y contador de historias, según ha reconocido el propio Arau.

En 1990 empezó a cosechar triunfos con la realización de la película Como agua para chocolate, basada en la novela homónima de Laura Esquivel, una cinta que ha recorrido todo el mundo y le abrió las puertas de Hollywood. En 1991 fue estrenada en la XXIV Muestra Internacional de Cine y en 1993 fue elegida para la categoría de filme internacional en los Oscar. Arau comentó sobre esta película: “Obviamente, lo de esa película me sorprendió. ¡Quién iba a imaginar una cosa así, pero yo tomé un riesgo impresionante, echándome deudas por dos o tres millones de dólares, hipotequé mi casa, mi oficina, todo¡. Lo único que quería era que entrara suficiente dinero para pagar las deudas y que la crítica me tratara más o menos bien. A eso era todo lo que aspiraba. Y fue una sorpresa cómo fue creciendo y creciendo. Pero lo que sí me plantee fue la forma de hacerla y la forma de promoverla y venderla.

“En primer lugar sabía que tenía un tema que podía ser universal aparte de ser mexicano. Pero yo me propuse hacer esta película, con una calidad industrial mínima, con la que pudiera llevarla al mercado mundial.

“Concebí una película que costaba, —para lograr este mínimo—, dos millones de dólares, lo cual es una barbaridad para México, donde las películas cuestan 350 mil dólares. Yo era un loco desaforado en México y la película era una absoluta locura.

“Por otro lado, he sido un director solitario en el cine mexicano, yo soy la oveja negra. Siempre he hecho un cine diferente, el cine que me da la gana. He sido un terco, empecinado, he hecho mis películas con sacrificios enormes, y realmente el grupo de cineastas en México ni siquiera me considera un colega. Tú ves los libros de los críticos de cine en México y no estoy en la lista de los cineastas, cuando tengo siete películas y las siete han sido éxitos de público muy importante. Ellos no pueden seguirme porque no existo para ellos. Para la mentalidad de mis colegas en México yo tuve un golpe de suerte, a lo mejor porque hablo inglés (...) Entonces vamos a tratar de vender Danzón [Dir. María Novaro, 1990]; El jardín del edén [Dir. María Novaro, 1993]; El callejón de los milagros [Dir. Jorge Fons, 1994], pero luego llegan aquí y las películas no tienen la calidad industrial ni tienen el ritmo dramático al que está acostumbrado el cine estadounidense y que yo conozco. Y entonces no pasa nada. Ahorita están estrenando El bulto [1991] que es de un magnífico cineasta, Gabriel Retes, que se estrena porque él se empeñó, porque es igual que yo. Pertenecemos al mismo club de descarriados. Y estrenaron [La invención de] Cronos [Dir. Guillermo del Toro, 1992] y no pasa nada, y no va a pasar nada. Porque no hay una escuela, no hay una tendencia, no hay una unidad. En México somos islas, somos un archipiélago...” (Sin financiamiento del distribuidor, no habrá en América Latina industria fílmica: Arau. La Jornada, sección cultura, 5 de agosto de 1995. P. 25)

El 14 de septiembre de 1995, su película Un paseo por las nubes, producida en Hollywood fue la que inauguró la 43ª. edición del Festival de Cine de San Sebastián.

Arau ha conseguido seis premios Ariel por su dirección, producción y/o los guiones de Como agua para chocolate, El águila descalza y Calzonzin Inspector. En Mojado power obtuvo el récord de película más taquillera de todos los tiempos en los cines de lengua española de Estados Unidos.

Ofelia Medina y Alfonso Arau,
actores de El águila descalza (Dir. Alfonso Arau, 1969)

En 1995 escribió el guión para Zapata y vendió los derechos a la empresa cinematográfica Universal International Pictures (UIP), mediante un contrato suscrito por 25 millones de dólares en 1997, y aún así, todavía no se produce, porque según nos dice Arau: “El rodaje de la cinta se pospuso debido a cuestiones ‘técnico-financieras’ (...) Hay un paso que se tiene que dar en las finanzas de Hollywood que se llama garantía de terminación, y ese se atoró. Tuve que parar el proyecto y seguí haciendo otras cosas”. (Alfonso Arau filmará Zapata en abril del 2001. Notimex, 22 de noviembre de 2000)

Respecto a la realización del guión para esta producción Arau refiere: “Este proyecto inicialmente me lo propuso Disney. Finalmente no se pudo realizar y se convirtió en una propuesta propia. En el guión presento un Zapata mitológico, espiritual, un guerrero sagrado. La historia la tomo sólo como un marco de referencia. Yo no soy un historiador soy un contador de historias. Les voy a relatar un Zapata que nadie sospecha”. (Soy un contador de historias. Por Ana Bianco. Reforma, 17 de noviembre de 1997)

En noviembre de 1997 Arau participó en el XIII Festival Internacional del Cine del Mar de Plata como integrante del jurado. En el año 2000 fue el productor y director del filme Cachitos Picantes (Picking up the pieces).

Referente a la labor de los escritores, en 1990 Arau habló sobre el guionismo en México: “Salvo una o dos excepciones, me aviento el tiro de decir que en México no hay quien sepa escribir un guión de cine. Y ya sé que en el momento en el que esto se publique me empezarán a zumbar los oídos por las mentadas de algunos que creen que sí. Especialmente de los magníficos dramaturgos que tenemos y que piensan que es lo mismo hacer cine que teatro, y de los pollitos del taller de guiones de mamá García Márquez (no le digo Gabo para que no me acuse de que ya me estoy apuntando como su amigo). Yo soy el más ferviente admirador de su literatura, pero, la neta, García Márquez todavía no ha escrito un guión que esté a la altura de sus novelas ni mucho menos.

“No se hace buen cine mexicano porque, según creo yo, hay una ignorancia total acerca de la técnica y de la estructura dramática: no hay amor por nuestra pasada cinematografía, pero sí un afán completo por copiar el cine europeo (...)

“¿Y la solución? Bueno, para que no digan que nomás crítico y no aporto nada, hay les va: yo propongo que se traduzcan y publiquen libros sobre guionismo, que se traigan guionistas importantes para dar cursos, que se vuelvan a escribir los melodramas que tanto nos gustan y que ahora se ven en las telenovelas, que se apoyen en nuestras raíces, que se retrate a los mexicanos de ahora en la pantalla, que (...) ¿es muy difícil?”. (Como para volver a vivir. Por Ana Lilia Arias. La Jornada Semanal, 11 de marzo de 1990. P. 20)

Alfonso Arau [derecha] durante la filmación de
El águila descalza (Dir. Alfonso Arau, 1969)
Colección Pascual Espinosa

GUIONES REGISTRADOS EN LA SOGEM

Quieres dormir con mi hermana (1993). Guión y argumento de Alfonso Arau.

Pantaleon and the visiting ladies Guión: Alfonso Arau, s/novela homónima de Mario Vargas Llosa.

90 millas (1997). Guión y argumento de Alfonso Arau, basado en la vida del buzo cubano Francisco Pipín Ferreras.

Emiliano el elegido (1997). Guión y argumento de Alfonso Arau.

La gloria eres tú (1996). Argumento de Alfonso Arau.